jueves, 3 de febrero de 2011

Porvenir. (O un bálsamo contra el insomnio).


Ilustración: Linn Olofsdotter.

"Te llaman porvenir
porque no vienes nunca.
Te llaman: porvenir,
y esperan que tú llegues
como un animal manso
a comer en su mano.
Pero tú permaneces
más allá de las horas,
agazapado no se sabe dónde.
... Mañana!
Y mañana será otro día tranquilo
un día como hoy, jueves o martes,
cualquier cosa y no eso
que esperamos aún, todavía, siempre."

Ángel González.

Reciclo poemas. Reciclar mis poemas favoritos de hace años es un bálsamo. No puedo dormir y estoy cansada. La ansiedad me supera. Las ilustraciones de Linn Olofsdotter son un opiáceo perfecto. Algunos idiomas duelen. Algunos idiomas recuerdan un pasado que a veces me pregunto si sucedió realmente. Y entonces no puedo dormir. Cuando intento reconciliarme con ese pasado irreal. Cuando no puedo evitar pensar en el futuro. Cuando quiero desaprender las lenguas con las que he crecido. Cuando intento por todos los medios no pensar. Mi insomnio es la indecisión, el porvenir, el deseo, la ceniza.

lunes, 31 de enero de 2011

¿Qué desierto?






"Ese naufragio permanente, ese desmayo emocional, la abocaba a convertirse en un ser temeroso que, incapaz de afrontar una realidad que escapaba totalmente a su comprensión, avanzaba por espacios vacíos, por un desierto metafísico".

Enrique Vila-Matas.

¿Desiertos metafísicos? ¿Acaso exíste aún la metafísica? ¿Todavía cree alguien en el desierto?
Busco el desierto. Me gusta pensar en el desierto aunque a veces piense que pierdo el tiempo. A veces me gusta perder el tiempo. Recuerdo algunos versos de Alejandra Pizarnik. Luego pienso que tiempo no es más que una palabra. Y quiero hacer tantas cosas inútiles, irreverentes, que la emoción me da náuseas. Sigo perdiendo el tiempo, y me mareo, y doblo el cuello hasta quedar con el cuerpo destrozado, otras veces decido que gritar es la única defensa contra la desidia del no-desierto, de un día árido o dos, y quiero decirlo todo, y vomitarlo, y ser otra persona, o varias, y quiero desdoblarme y desdecirme. La voz, el sexo, la maleta, la palabra. Se puede gritar de tantas formas. Bienvenidos al espectáculo. Bienvenidos al ahora.

domingo, 30 de enero de 2011

Lo que trae la mañana.



" Mi cuarto parecía -nuestro cuarto-
una juguetería después del cataclismo,

un campo de batalla con dos supervivientes".



Andrés Neuman.